Reclamaciones de seguros y de impagados

Reclamaciones de seguros

Las compañías de seguros pueden cubrir los distintos riesgos que nos encontrarnos en la vida empresarial y cotidiana a cambio del pago de una determinada prima. Para ello, si dispone Ud. de una póliza de seguro en donde se cubra el riesgo, debe Ud. reclamar los importes y las garantías contratadas.

No obstante es frecuente que las compañías aseguradoras intente acogerse a condiciones generales incluidas en las pólizas -redactadas unilateralmente por las propias compañías aseguradoras- para tratar de reducir la cuantía e incluso evitar el pago alegando que la contingencia no está realmente asegurada, en base a exclusiones ilegales o, también llamadas cláusulas limitativas de los derechos del asegurado (nulas).

Nosotros nos comprometemos a tramitarle la reclamación extrajudicial o judicial de cualquier seguro en su importe máximo frente a un incumplimiento de la Compañía de Seguros, estudiando pormenorizadamente el clausulado de las condiciones generales y particulares.

Reclamaciones de impagados

Somos conscientes de la importancia que los impagados tienen realmente para la supervivencia de nuestros clientes, -negocios, empresas y particulares-, así como de la transcendencia que supone actuar con agilidad y rapidez. Por ello, para la gestión de cobro de sus impagados le ofrecemos los siguientes servicios:

Análisis inmediato del asunto:
Una vez puesto en nuestras manos, se abre el correspondiente expediente trabajamos sobre toda la información y documentación del caso. En este análisis partimos siempre de los siguientes principios:

En todo momento hay que respetar las condiciones de compra exigidas por el comprador y emitir las facturas según los requisitos que ha marcado el cliente. El cumplimiento estricto de todas las condiciones del cliente permitirá que como acreedores podamos reclamar el pago desde una posición de seguridad y fuerza moral.
En caso de que detectemos un litigio comercial que es aprovechado por el deudor para no pagar, actuamos con toda diligencia para solucionar el litigio y desbloquear el pago.

Averiguación y análisis de la solvencia del deudor para adaptarnos a su perfil:
Antes de iniciar la reclamación tratamos de obtener la máxima cantidad de información acerca del deudor, tanto de fuentes internas como externas, y tanto económicas –solvencia, endeudamiento, liquidez– como personales. También hay que recoger toda la información referente al crédito pendiente de cobro, el historial del cliente y la documentación relacionada con el mismo. También investigamos y averiguamos el patrimonio del deudor, sea persona física o sociedad mercantil al objeto de poder calificar su solvencia o insolvencia. Y en caso de sociedades, investigamos también la solvencia de los administradores de la sociedad.

Negociación extrajudicial y acuerdos con el deudor:
Se buscará una solución negociada al asunto, tratando de llegar a convenios con el deudor tanto de importes como de plazos de pago, bien antes de llegar a la vía judicial, o durante esta, siempre que con ello se eviten costes económicos o largas esperas en ejecuciones judiciales para nuestros clientes.

Reclamación judicial de cantidad:
Cuando se considere estrictamente necesario, se interpondrán los procedimientos judiciales contra el moroso que se decida en cada caso (monitorios, ordinarios, cambiarios, ordinarios o verbales contra administradores,...). La experiencia nos dice que los créditos incobrables por la vía amistosa muchas veces se cobran en el momento en que se notifica al moroso la interposición de una demanda judicial.

Reclamación contra administradores:
En caso de reclamaciones a sociedades, si no se cuenta con evidencias de solvencia para hacer frente a la deuda, y existen indicios suficientes de que los administradores han incurrido en algún supuesto de responsabilidad, se planteará contra estos el procedimiento que se considere más oportuno, con el objetivo de cobrar la deuda a cuenta del patrimonio de estos administradores, por vía civil o incluso penal si hubiese además indicios de delito.